Uno de los sitios más duros que ver en Polonia es Auschwitz.
Auschwitz se sitúa a 1h 30 min en bus/coche desde Cracovia, pero sin lugar a dudas es una de las visitas imprescindibles si vais de viaje a Polonia.
Si no sabéis cómo llegar hasta Auschwitz os dejo el Post con toda la información.
Como consejo si viajáis con niños, no es una visita en la que deberían entrar ya que es importante mantenerse en silencio, además, de las fotografías y de todos los objetos personales que hay en su interior.
VISITAR AUSCHWITZ
¿QUÉ ES O QUE FUE AUSCHWITZ?
Auschwitz es lo más parecido al infierno que puedes estar.
Auschwitz, fue un complejo de campos de concentraciones y exterminio más terroríficos de la historia, cuya principal finalidad era asesinar y exterminar a los judíos.
Más de un millón de personas fueron asesinadas a manos de los nazis en estos campos de concentraciones.
La visita la verdad es que te hace replantearte cómo el ser humano es capaz de llegar a esos extremos por tener ideologías o pieles diferentes, es algo de LOCOS!
La Vista al campo de concentraciones es de las más duras que vais a ver, sobretodo después de pasar por la cámara de gas y posteriormente por los incineradores.
Lo primero que os encontraréis antes de entrar al campo de concentración es un arco con la famosa frase “Arbeit macht frei” (El Trabajo os hará Libres).
Una frase que la verdad te encoge el alma nada más entrar.
Uno de los pabellones que vais a ver y que a nuestro parecer es bastante impactante, es la sala en la que se encuentran las gafas, utensilios de cocina, carteras (las cuales llevan nombres y apellidos) que fueron extraídos de todas aquellas personas que no tenían “derecho a vivir”.
Da igual el pabellón al que vayas, cada uno tiene algo que te impresiona.
Una de las partes más fuertes es donde fusilaban a los prisioneros.
Otra de las salas que os encoge el corazón son la cámara de gas y el “horno”.
Después de ver Auschwitz I nos vamos a dirigir a Auschwitz II-Birkenau.
Si Auschwitz I os impresionó os aseguro que este lo hará x2.
Aquí podrás ver las famosas vías del tren donde entraban tanto los hombres, los niños y las mujeres.
Una vez el tren los dejaba en el interior del campo, se formaban dos colas las mujeres y niños por un lado y los hombres por el otro.
Dependiendo de la condición física que tuvieran cada uno de los prisioneros, eran mandados a trabajar como esclavos o los llevaban directamente a las famosas “Duchas” las temibles cámaras de gas.
Uno de los sitios que vais a visitar son los barracones, que son la zona donde dormían los prisioneros.
Sinceramente, creo que esta zona fue de las que más me impactó (junto con la cámara de gas y el horno), ya que el imaginar cómo eran capaces de dormir unos encimas de otros en condiciones infrahumanas y pasando verdaderas calamidades es algo…Horroroso!.
Auschwitz es uno de los sitios más duros en los que hemos estado y el que más nos ha impactado no solo por todo lo que ves, sino también por la energía que te transmite una vez estás dentro.
Nosotros fuimos en invierno, hacía mucho frío y llovía y a mi no me entraba en la cabeza como toda esa pobre gente fue capaz de aguantar ese tipo de calamidades con un simple pijama de rayas, además, del hambre que pasarían.
Es un sitio duro pero a la vez imprescindible de ver, sin duda lo recomiendo mucho.
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